miércoles, 2 de febrero de 2011

Preguntas enredadas

¿Por qué no viene en los libros de texto, ni en las enciclopedias, la parte del aparato respiratorio (o digestivo) adonde caen las palabras que deseamos fervientemente pronunciar pero por miedo o por mandato no podemos, esas palabras que se sostienen en un frágil equilibrio en las cuerdas vocales?


¿Y dónde narices está la goma de borrar o el backspace cuando decimos algo incómodo o indecoroso justo en ese momento tan inoportuno?
¿A dónde va Super Mario cuando cae por un precipicio?


Si deshacemos con sumo cuidado la pareja para que no vuelvan a juntarse, si les quitamos todos los enredos con extrema precaución, ¿por qué se aman tanto los cables de los auriculares que vuelven a anudarse? Y al contrario, ¿por qué se empeñan en divorciarse los cordones de los zapatos?

¿Y qué diferencia hay entre desnudarse y desanudarse?


Quizá la teoría de cuerdas responda a nuestras dudas...



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Equilibrista....ofú....a saber dónde, cuándo yo por qué ¡¡¡

Cuenticiente dijo...

¡Me encantó Deivid! Estáis concentrados ¿eh? ¡Que siga la cosa!

María Dolores dijo...

Vaya David, con una cuerda también se van enlazando tus pensamientos, o mejor dicho tus preguntas. Si supieras que me han entrado ganas de seguir. Claro que ahora, ya lo sabes.

Loli.