jueves, 7 de agosto de 2008



Tierras de Teruel

La luz es tan limpia que incendia las tierras y sus texturas coloreadas serpentean muros y tejados de ocres amarillentos y rojizos. Aquí no se mezclan los colores, no armonizan, rivalizan sobre el tapiz reseco y agrietado que lo sostiene.

Terrenos duros, extenuados de pólvora y pastoreos, de espadas y labranzas. Toponimia de frontera – Iglesuela del Cid, Mirambel, Mora de Rubielos, Nogueruela, Albarracín…- de donde hoy huyen hasta los pensamientos dejando al abandono señorear donde no lo consiguieron turbantes ni yelmos.

En el aire, el olor agridulce de la ontina –manzanilla- y el rumor del agua discurriendo oculta por hondos barrancos. Aquí nacen y desde estas hendiduras huyen ríos que alimentan otras tierras: el Tajo que despista a tres provincias para largarse a Toledo y abrazar las tres culturas que aquí no encontraban sosiego; El Mundo, ¡menudo despropósito de nombre!; El Gabriel que aquí abre sus ojos despavorido; El Turia que ya va regando su cauce ansioso de azahares mediterráneos…

Barrancos para descolgar castillos o campanarios-minaretes si no llevaran imbricados el caserío que se les arracima a sus faldas. Edificios de barro que reseca el alma de la memoria. Geometría cubista, paralepípedos animistas de tierra pétrea, arañados de dibujos-símbolos metafísicos, naturalezas inanimadas… Tierras sin gente. ¿No hay ya soledades que compartir?

Fita

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Casi prefiero no haber estado allí, así tengo la oportunidad de apreciarlo todo mejor a través de tus ojos. Las crónicas de viajes te salen de maravilla, espero que esta no sea ésta la única.

Antoñín

genialsiempre dijo...

Fita, yo estuve por allí en Marzo y te recomiendo no te pierdas la sabina-pinera, pregunta por ella, vale la pena. Por lo demás tu relato es tan ´nítido y preciso, que me has vuelto a transportar a esas tierras que yo en mi visita, me las imaginaba en verano, y ahora tú ne las coloreas.

jose marias

JUAN dijo...

Lección de historia, guía de viajera,ensayo sociológico.
En definitiva un auténtico placer leer lo que has escrito
Besos.