jueves, 19 de julio de 2007

una nota

Queridísima gente:
no podré ir mañana a la barbacoa de despedida y lo cierto es que me duele no poder estar allí con vosotras y vosotros. Ha sido un año muy especial Todos los años lo son, eso es bien cierto, pero este curso ha sido sin duda el más extraño y arrabatador de cuantos he vivivo. Extraño porque me he sentido tan accesorio que me he dado cuenta de que el síntoma de que las cosas en la Escuela de Letras Libres han ido lo mejor que podían haber ido es precisamente porque vosotras y vosotros la habéis hecho vuestra con entusiasmo y generosidad. Y digo que ha sido también arrebatador porque me he sentido desbordado por vuestra entrega y a veces incluso me ha dado la impresión de que íbais a una velocidad que yo apenas era capaz de seguir. Esto me ha hecho muy feliz y me ha dado mucho que pensar. Por no hablar todo lo que me habéis enseñado sin pretender enseñar, que es como se enseña en realidad.
Por eso lamento no poder acompañaros el viernes. Compromisos vitales me reclaman todo el finde semana y no tendré opción. Eso sí: ya he hablado con raquelilla por si, mediado el verano, repetimos el encuentro. Sería para mí la oportunidad de reconoceros, de reconocerme y de compartir y agradecer vuestra complicidad y vuestra unión, que han sido el alimento de este curso. Y, además, me da a mí que esto es sólo el principio. Esta gran historia de amor colectivo no ha hecho, me parece, más que empezar.
Gracias por estar y por ser.
Os quiero.

1 comentario:

Raquelilla dijo...

Si siii, mucho os quiero y to eso... pero el punto negativo no te lo va a quitar nadie. jijiji
Ra