lunes, 11 de febrero de 2013

Resurrección


Resurrección

 

 

Cree la berza que llegó el fin de sus días. Se piensa agonizante desde que le arrebataron el amor de su vida: la pringá. Sin embargo hoy le ha llegado del cielo una resurrección inesperada: un puñaíto de arroz.

2 comentarios:

Equilibrista dijo...

Claro, por eso se llama así esa comida jijiji

Qué pajo berza. Buen micro ;)

Unknown dijo...

Ay qué chulo el relato... me ha traido recuerdos de mi niñez. Me encanta regresar de vez en cuando a aquellos tiempos y he podido incluso oler las berzas que hacía mi madre, y persiguiendo ese maravolloso olor, corríamos escaleras arriba guiados por ese transparente anzuelo que nos enganchaba y atrapaba tan deliciosamente.