Lección de historia en la clase de geografía de España.
Entre dos mares, esta península desea un mar que no alcanzan sus tierras resguardadas por enormes murallones que la circundan. La mar dulce y tibia, la que se navega entre vecinos de viejos espacios y de largas historias, esa mar de poetas vigilada por las ánimas de los que descansan en la ladera de un monte más alto que el horizonte para tener buena vista. El otro, el océano escatológico de profundidades infernales e insondables, sólo a la altura de heroicas hazañas de marinos hispanos o de aventuras de piratas y corsarios. Mares circundantes pero lejanos, presentidos, más de marineros en tierra.
Entre dos continentes, el lejano ¡tan cercano!, el que prolongó occidente llevándose lo mejor de nuestras gentes y que guarda nuestra palabra rehecha y reinventada. El otro, el más próximo, ¡tan lejano! Al que volvemos la espalda para fingir que no lo vemos incluso teniéndolo dentro. Gentes y espacios de los que vamos y venimos y que prolongándonos en ellos nos van haciendo.
Tierra aireada de levantes y ponientes, agitada por anticiclones y borrascas, umbría a barlovento y solana a sotavento, a la orilla del trópico y a la altura de los hielos… Alumbrada de dos verdores a destiempo, el que verdea los veranos del norte y el que en invierno tapiza los ocres estivales del maquis y la garriga. De inviernos crudos y de veranos asfixiantes, de sequías y aguaceros, esta tierra sin templanza sólo descubre la primavera labrando la tierra con secretos milenarios.
Aquí conviven la altura y el llano, los verdores lujuriosos y los amarillos estériles, las frutas tropicales y los líquenes de montaña, el escorpión y la babosa, las setas y los cactus, la alondra y la marmota, el águila y el buitre, el lobo y el cordero…
Está construida de contrarios, respira lo diverso. Singularidad de un espacio copulativo.
Entre dos mares, esta península desea un mar que no alcanzan sus tierras resguardadas por enormes murallones que la circundan. La mar dulce y tibia, la que se navega entre vecinos de viejos espacios y de largas historias, esa mar de poetas vigilada por las ánimas de los que descansan en la ladera de un monte más alto que el horizonte para tener buena vista. El otro, el océano escatológico de profundidades infernales e insondables, sólo a la altura de heroicas hazañas de marinos hispanos o de aventuras de piratas y corsarios. Mares circundantes pero lejanos, presentidos, más de marineros en tierra.
Entre dos continentes, el lejano ¡tan cercano!, el que prolongó occidente llevándose lo mejor de nuestras gentes y que guarda nuestra palabra rehecha y reinventada. El otro, el más próximo, ¡tan lejano! Al que volvemos la espalda para fingir que no lo vemos incluso teniéndolo dentro. Gentes y espacios de los que vamos y venimos y que prolongándonos en ellos nos van haciendo.
Tierra aireada de levantes y ponientes, agitada por anticiclones y borrascas, umbría a barlovento y solana a sotavento, a la orilla del trópico y a la altura de los hielos… Alumbrada de dos verdores a destiempo, el que verdea los veranos del norte y el que en invierno tapiza los ocres estivales del maquis y la garriga. De inviernos crudos y de veranos asfixiantes, de sequías y aguaceros, esta tierra sin templanza sólo descubre la primavera labrando la tierra con secretos milenarios.
Aquí conviven la altura y el llano, los verdores lujuriosos y los amarillos estériles, las frutas tropicales y los líquenes de montaña, el escorpión y la babosa, las setas y los cactus, la alondra y la marmota, el águila y el buitre, el lobo y el cordero…
Está construida de contrarios, respira lo diverso. Singularidad de un espacio copulativo.
Fita
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Hoy tengo el día político/patriotero ...
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Hoy tengo el día político/patriotero ...
2 comentarios:
No sé si después de leer tu texto que me parece muy bueno, el turismo saldrá beneficiado, pero como supongo que eso no nos preocupa ... pues me sumo a todo lo que dices.
Jose María
Deberían haber msa maestras como tú, Fita, con esas explicaciones geográficas seguro que muchos adolescentes se engancharían mejor al estudio.
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