lunes, 20 de abril de 2009


Pongamos que
salgo de Madrid...


Van quedándose atrás las torres-hormigueros y los aparcamientos de las grandes superficies dónde infinitas hileras de coches aguardan como tumbas de guerra anónimas que les alimenten el capó hasta atiborrarlo de plásticos repletos de globalización, que les descuelguen en los asientos seres ahítos de abalorios inflacionados hasta corroerlos oxidándoles la vida.

Va pasando un paisaje estéril que va devorando el secano fértil con ladrillos adosados a cuentas especuladoras mamadas en recalificaciones desde sillones municipales.

Va alejándose la ciudad mientras que el cielo se cierra y el aire se hace gris y densa la calma que contiene una tarde de perros abandonados y húmedos.

Va acercándose el paisaje que aguardaba esta tarde para enlucirse de verdores lubricados en aguaceros recientes y que aguarda con anhelos de amante satisfecha la acometida que se presiente…
Fita



















4 comentarios:

Anónimo dijo...

Perdona que me aparte del tema, pero ví el video (y eso que no acostumbro a ver videos) de Carmen Quintero cantando las bulerías...Buenísimo...Y de paso, creo que me enamoré de esa gitanilla que parece traida directamente del japón. Ahora, en lo que tenga chance voy a buscar los discos de ella.

Pedro Estudillo dijo...

Afortunados nosotros que podemos dejar atrás toda esa borágine urbanística y humana para adentrarnos en la belleza de poemas como el tuyo.

genialsiempre dijo...

¿Que me vas a contar a mí?, pero claro que con la plasticidad que tú lo haces vale la pena leerlo.

José María

Raquelilla dijo...

Crítica, poética y fotográfica, genial Fita, ya tenía ganas de repasar todo lo que habéis escrito en este tiempo que he estao abandoná del blog por los estudios y los pequeños dictadores que tengo en casa.