lunes, 9 de junio de 2008

Portazos

Lamento que no vengas…
¡Eso no es!
Cuando se desespera la espera
¡Eso no es!

Cuando se desvive lo que se revive
Cuando se descorre lo que se recorre
Cuando se desalienta lo que se alienta

¡Eso no es!

te llamaré
¿ para qué?

Cuando se desconcierta lo que se concierta
Cuando se desdobla lo que se redobla
Cuando se trasvasa lo que se rebasa

¿Ya para qué?

Fita

5 comentarios:

Pedro Estudillo dijo...

Vaya rabieta, en todas las narices. Claro que con poesía, algo se suaviza. Ventajas de los poetas.
Muy bueno.
Saludos.

Escuela de Letras Libres dijo...

Esto me coje con 20 años menos y se lo espeto al más pintado. Ahora es que ya nadie me da plantones.

jose maria

JUAN dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
JUAN dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
JUAN dijo...

Ante de nada, yo he sido el de los dos comentarios suprimidos, debe ser que es la hora de almorzar y tengo hambre por eso en ambos me he comido letras.
Decía que los anteriore poemas rebosaban amor, pero este rezuma despecho.
Que bueno que seas una escritora poliédrica.
Gracias por el deleite